No se aceptan devoluciones

No se aceptan devoluciones Valentín (Eugenio Derbez) es un residente de Acapulco que vive una vida sin complicaciones, disfrutando de su soltería lo máximo que puede. Todo va a cambiar, sin embargo, cuando una mujer con la que tuvo una aventura hace tiempo, deja un bebé en la puerta de su casa y se va sin dejar rastro. Valentín viaja desde México a Los Ángeles para buscarla pero no la encuentra. Sin embargo, lo que sí que encuentra es un nuevo hogar en el que instalarse con su recién descubierta hija, Maggie (Loreto Peralta). Valentín cría a Maggie durante seis años de la mejor forma que puede, mientras que él mismo se establece como una importante figura en Hollywood. A la vez que Valentín educa a Maggie, él también madura y aprende a comportarse como un adulto. No obstante, la vida de Valentín va a cambiar una vez más cuando la madre de Maggie vuelve a aparecer. Entonces, Valentín se da cuenta de que puede perder la custodia de su hija, algo que intenta evitar por todos los medios.

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Mi critica, No instructions included, el título original de la película no podría pegarle más. Desde el principio hasta el fin no sabía que pensar de ella. Tenía un batiburrillo de opiniones y emociones que se iban confundiendo. Algo así como… ‘ Vale, es una historia tan típica, los gags están ya tan gastados, cliché por aquí, cliché por allá, entonces…. ¿COMO ES CAPAZ DE HACERME SENTIR ESTO?»

Esa es quizás la medalla de Derbez, que un argumento tan masticado por todos nosotros, una historia tan poco novedosa, consiga despertarte ese gusanillo en el corazón, esa ternura inexplicable que te atrapa durante todo el film. (Juro que hubo momento que me sentí misteriosamente manipulada por los clichés, pero me dejé llevar tan a gusto)

El caso es que, siendo cierto que NO ES UNA GENIALIDAD DE HISTORIA (ya todos la conocemos de alguna forma u otra) consigue sacarte unas cuantas carcajadas y más que un par de lágrimas.

Y eso, con el cine frío hollywoodiense al que estamos constantemente sometidos, se agradece muchísimo. Quizás la culpable haya sido Maggie, me he enamorado de ella tan rápido como su padre.

Una verdadera pena el guión, podría haber dado tanto esta película con un nudo un poco más personal…